“Pongámosle un poquito de seriedad al país y digamos las cosas con claridad, secuestro es secuestro, no hay las tales retenciones. Esa es una entelequia que se le ha venido diciendo al país; secuestro es secuestro y por eso seguiremos investigando esas conductas en el marco de la tipificación del código penal que establece el secuestro”. Así se refirió el Fiscal General de la Nación, sobre la situación que tuvieron que afrontar militares que fueron retenidos por la comunidad indígena del Resguardo de San Francisco, en zona rural del municipio de Toribío, en el nororiente del departamento del Cauca.
El fiscal Barbosa anunció que en los próximos días se van a conocer las responsabilidades penales que tendrían lo supuestos autores de lo que calificó como “secuestro” y dijo que no se puede hablar de cerco humanitario en casos como estos.
El grupo de 17 militares fue dejado en libertad la tarde del miércoles por la comunidad que los acusó de haber herido a una persona en un allanamiento. Tras durar varias horas en poder de la comunidad, los uniformados fueron entregados a una comisión de la Defensoría del Pueblo que los sacó de la vereda La Pila, ubicada en el resguardo indígena San Francisco. Una comisión humanitaria de la Defensoría “llegó hasta el resguardo” para ejecutar “tareas de acercamiento y posterior mediación con la comunidad indígena en la cual se encontraban retenidos 17 militares adscritos a la Tercera División del Ejército Nacional por parte de los pobladores de la zona, tras una operación militar”, detalló el organismo en un comunicado.