El censo de víctimas al momento de firmarse el Acuerdo de Paz con las FARC no sobrepasaba de las 3’500 mil personas, pero luego de los pronunciamientos de la JEP y el ánimo mostrado por los victimarios de no reparar el daño, queda el Gobierno como garante de conformidad con la Ley 1448 del 10 de junio de 2011, otorgando ayuda humanitaria, atención, asistencia y reparación a las víctimas y reivindicando su dignidad…Pero no son todos los que son, ni son los que están y deben ser, porque, con documentos falsos y prevalidos de palanca política, muchos se han enlistado sin derecho alguno….Más de 42 mil registrados como víctimas han sido excluidos.
Cuando se clama por reducir el número de parlamentarios dilapidadores del erario, la Procuradora Margarita Cabello advirtió a raíz del nuevo incremento de miembros del Congreso, que las curules de las Circunscripciones Transitorias Especiales de Paz deben ser para víctimas reconocidas como tal…Indicó que “los 16 escaños deben tener como únicos protagonistas a víctimas del conflicto que provengan de las Circunscripciones Especiales, entre ellas las del Cauca, uno de los departamentos más golpeados por la violencia, como también, Córdoba, Chocó, Caquetá, Putumayo, Nariño, Norte de Santander, Bolívar, Antioquia, Sucre, Guaviare, Magdalena, Cesar, La Guajira, Tolima y Arauca”.
Se consideran víctimas individual o colectivamente quienes hayan sufrido un daño por hechos ocurridos a partir del 1º de enero de 1985, como consecuencia de infracciones al Derecho Internacional Humanitario o de violaciones graves y manifiestas a las normas internacionales de Derechos Humanos, ocurridas con ocasión del conflicto armado interno. También son víctimas el cónyuge, compañero o compañera permanente, parejas del mismo sexo y familiar en primer grado de consanguinidad, primero civil de la víctima directa, cuando a esta se le hubiere dado muerte o estuviere desaparecida.
Así, los 11 millones enlistados como víctimas hoy, no son los llamados a ser reparados y si a eso vamos, todos los colombianos hemos sido víctimas de las FARC y lo seguimos siendo, como de otros grupos armados ilegales, porque el conflicto no termina y Colombia sigue padeciendo los rigores de la violencia y el terror.
Hemberth Javith Paz Gómez