El Ejército Nacional emprendió acciones legales ante la Fiscalía General de la Nación, por la retención de un grupo de militares que fueron retenidos por indígenas en la hacienda La Emperatriz, quienes adelantaban lo que denominan “liberación de la madre tierra”, reclamando como propio este terreno que han intervenido durante más de una década y que es exigido en el marco de los acuerdos pactados con el estado, tras la masacre del Nilo ocurrida el 16 de diciembre de 1991, en la cual personal uniformado de la Policía Nacional se vio comprometido en el asesinato de 21 nativos.