En la lupa de la Contraloría el Hospital Universitario San José de Popayán, por millonario sobrecosto en compra de camas para atender Covid-19.
En la lupa de la Contraloría General de la Nación, se encuentra el Hospital Universitario San José de Popayán, por el Contrato N°0151 de 2020, firmado el 31 de marzo, último día laboral de la Ex-Gerente Derlin Delgado Rodriguez, por un valor superior a los 800 millones de pesos, para la compra de camas de cuidados Intensivos y hospitalización para atender pacientes con Covid-19.
Según la Contraloría General de la Nación, el contrato presenta sobrecostos de hasta el 116% en cada cama comprada. Como se puede observar en las imágenes adjuntas, cada cama electrica para cuidados intensivos se compró por un valor de 20 millones 777 mil 400 pesos, cuando en el mercado tiene un costo de 9 millones 500 mil pesos, es decir, que cada cama tendría un sobrecosto de 11 millones de pesos.
En otro caso, la Contraloría encontró que 31 camas para hospitalización fueron compradas por la Ex Gerente Derlin Delgado Rodriguez, por un valor de 6 millones 300 mil pesos, cuando realmente cuesta 4 millones 400 mil pesos, lo que tendría un sobrecosto de casi 2 millones de pesos cada cama.
En total serían 181 millones de pesos de sobrecostos en todas las camas, compradas por la Ex-Gerente del Hospital Universitario San José, Derlin Delgado Rodriguez.
Ante esto, la exgerente Derlin Delgado se pronunció y aseguró que no le han comunicado informes de auditoría de la Contraloría, que permitan sostener que existe un presunto sobrecosto y/o detrimento al patrimonio público.
“Conclusión a la que solo se puede llegar, después de analizar las especificaciones técnicas de las camas de cuidado intensivo y el estudio de mercado realizado por la entidad, el cual, debe partir de la situación de mercado generada por la emergencia decretada por el Ministerio de Salud, con ocasión de la pandemia COVID19”.
Asimismo, admitió que el contrato se celebró el día 31 de marzo de 2020 (último día de ejercicio del cargo), por lo que la ejecución del mismo, entrega de los muebles, recibo a satisfacción y eventual pago se deberá realizar por la nueva administración.
“Desconozco lo ocurrido en la ejecución del contrato, pues mi función como gerente terminó el día 31 de marzo, subrayó.
Finalmente, afirmó que estará dispuesta a dar las explicaciones necesarias a los órganos de control.
El actual gerente César Sarria señaló que desde el pasado mes de abril la Contraloría y la Personería han solicitado información sobre el primer contrato, por lo que esperan los resultados de las investigaciones que corresponden a contratos realizados en la administración anterior.