Cuando se realizaban trabajos de adecuación de espacios y reparación de la infraestructura de la Institución Educativa Perico Negro, del municipio de Puerto Tejada, en el norte del Cauca, un trabajador cayó al vacío, al desplomarse el techo de uno de los salones donde se presentaban goteras durante las lluvias.
Educadores del colegio, denunciaron que es evidente que no existen garantías para el retorno a clases en planteles como este, dónde ni la infraestructura, ni las medidas biosanitarias son las mejores para brindar seguridad a los niños y niñas que acuden a recibir su calendario académico.
Aseguran que, esta es una muestra del estado en el que se encuentran varios planteles en Puerto Tejada y otros municipios del Cauca, que ofrecen precarias condiciones para la comunidad educativa y que no son seguros. En varias sedes no hay servicio de energía, agua, baterías sanitarias, internet, restaurante escolar , entre otras grandes necesidades, cómo por ejemplo ocurre en Río Chiquito, en Páez, Cauca.
Así las cosas, el riesgo para el retorno a clases en colegios del Cauca, no radica solo en la pandemia de Covid-19, sino en la infraestructura obsoleta de las sedes, el desplazamiento de los alumnos desde sus casas sin transporte escolar, atravesando ríos sin puentes y exponiéndose a factores delincuenciales en el camino.